No es nuestra intención repetir aquí los conceptos que se pueden encontrar en cualquier diccionario o enciclopedia. Simplemente daremos la concepción que nosotros hemos tenido por más apropiada para nuestra construcción interpretativa, en otro Trabajo, de los Arcanos del Tarot. Cuando se habla de algo arcano se entiende que tratamos con algo misterioso, secreto, difícil de explicar; pero también, además, podemos suponer que se trata de algo de una Antigüedad indefinible, desconocida. Como Concepto secreto, podrían reconocerse como arcanas todas aquellas iconografías relacionadas con las artes esotéricas tales como la alquimia “Mutus Liber o Fuga de Atalanta” a pesar de que en estos casos, al contrario que con el Misterioso Tarot, sí se conoce tanto su procedencia como la época concreta o aproximada de su nacimiento.
Como vemos, no es tan fácil concretar el significado real de la Palabra Arcano; pero para que nosotros nos podamos entender sin derribar lo oficialmente establecido, diremos que Arcano es todo aquello que nos llama la atención, sin remediarlo ni comprenderlo del todo, y cuyo origen fuese incierto y en exceso antiguo. En este sentido, podemos considerar los libros de estampas, mencionados, como en verdad Arcanos, dado que a pesar de que se conoce su fecha aproximada de creación, sin embargo entendemos que el misterioso conocimiento, la idea, que ha provocado su confección en algo visible se remonta a una tradición no escrita de origen muy antiguo e indefinido.
Es evidente que no todas las cosas misteriosas y de origen indefinidas son Arquetipos, ya que es posible que no nos digan nada a ningún nivel. Ahora veremos de qué estamos hablando; pero, no obstante, todos, todos los Arquetipos son Arcanos dado que los Arquetipos son, en sí mismos, indefinibles e incomprensibles para una mente no entrenada. No así para lo que se viene a denominar como corazón, intuición, subconsciente… Los Arquetipos son tan antiguos como las Ideas que los han originado y ya sabemos, según Platón, que el Mundo de las Ideas es anterior al de los efectos; por lo tanto, han sido las propias Ideas quienes han dado lugar a los Arquetipos
Los Arquetipos, para nosotros, vienen a ser como los Principios de Ideas inaprensibles que sirven como llaves que abren las cerraduras que mantienen cerradas las puertas de nuestro subconsciente. Evidentemente, según su origen, cuando hablamos de arquetipo nos estamos refiriendo además a ideas plasmadas por medio de algún tipo de Grafía impresa. Algunas veces, creo que de forma mal utilizada, al hablar, nos referimos a los Arquetipos como si fuesen las propias ideas y además unas ideas inamovibles; por lo menos, hasta que no se demuestra que estaban equivocadas.
Así no son los Arquetipos, los Arquetipos son imágenes que hablan con nuestro subconsciente de forma directa, sin que nuestra consciencia, en principio, tenga nada que ver; pero cada Arquetipo actúa de forma variable, flexible, diversa, sobre cada Mente humana. Los Arquetipos, aunque su grafía o imagen no varíe, eso es evidente cuando trabajamos con una impresión concreta, su significado no puede ser nunca objetivo, siempre es subjetivo. Aunque el Arquetipo, en principio no sea más que una impresión, se transforma en imagen mental que sigue siendo arquetipo y esos son, por poner un ejemplo, los que se utilizan para interpretar los sueños. Otras imágenes que se pueden denominar como Arquetipos son las imágenes abstractas que utilizan los psicólogos para determinar nuestro estado mental. En este caso, concreto, las imágenes son de reciente creación; pero no es menos cierto que, las tales, nos han acompañado, como imágenes mentales, desde el alborear de la razón; es por ello que también son Arcanos en relación con su misterio y antigüedad indefinida.
Los Arcanos Arquetípicos, entrando en meditación sobre sus imágenes, permiten que nuestra consciencia reciba información coherente de nuestro subconsciente sobre un Tema determinado previamente; pero una información, que en principio es particular de la persona que consulta al Arcano Arquetipo. Las ideas abstractas, de algún modo, han sido trasladadas a nuestra memoria y nuestro consciente, ahora sí, es capaz de catalogarlas y de proceder a darles una interpretación. En un momento determinado esas ideas pueden ser válidas; pero el Mundo de las Ideas es terriblemente cambiante por lo que hay que ser comprensivo a la hora de su interpretación.
ARALBA
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